Desembarca en Barcelona Eichholtz, tienda holandesa dedicada a la fabricación y distribución de mobiliario de lujo. La boutique, que es la primera en Europa, está ubicada en calle Mallorca 268 y llega bajo la representación de Hestia como Eichholtz by Hestia.

Eichholtz: estilo ecléctico, lujo y exclusividad
Manuel Gulias, representante de Eichholtz by Hestia, explica el día de la inauguración de la tienda que se enamoró de Barcelona y de la firma hace muchos años. Por ello, la apuesta por abrir la primera tienda de Europa en la ciudad de Barcelona, le llena de orgullo y, también de emoción. Respondiendo a una oferta de decoración de la que, considera, existen pocos establecimientos en la ciudad, Eichholtz llega con su estilo ecléctico, de lujo y exclusividad. Este ADN es el que motivó a fundar la firma en Holanda en 1992. Con un showroom en este país, hasta el momento, la empresa tiene monomarcas en otras ciudades. Entre ellas San Petersburgo o Miami, siendo la tienda de Barcelona, la primera de Europa.

Barcelona, una ciudad atractiva y referente en corrientes decorativas
El porqué de la elección de Barcelona responde a varios motivos. Uno es la posibilidad de acceder al mercado de la Península Ibérica y la parte de Europa Mediterránea. La Ciudad Condal es considerada un foco atractivo para visitantes así como para residentes de origen internacional. Estos últimos eligen Barcelona como primera, segunda o tercera residencia. Otro factor decisivo ha sido que Barcelona es vista como una ciudad sumamente interesante en el ámbito del diseño, la decoración, la arquitectura o el interiorismo. Este interés permite que, tanto particulares como profesionales, encuentren en la ciudad inspiraciones, productos y diseños para llevar a cabo sus proyectos de decoración o interiorismo. En este sentido, Gulias añade la armonía de estilos que encuentra entre la firma y la ciudad. Los productos de iluminación, accesorios o mobiliario de Eichholtz siguen una línea de ‘clásicos modernizados’, ofreciendo una gran variedad de «piezas inspiradas en las principales corrientes decorativas del siglo XX, como el Modernismo o el Art Déco», dice. Estos estilos, considera, «se adaptan exitosamente a la remodelación de un piso en el barrio del Eixample o cualquier finca regia de la ciudad».